En el mundo digital estamos demasiado acostumbrados a lo gratuito ya sean los videos que se puede descargar desde aplicaciones de Torrent, la música que se puede escuchar en YouTube o incluso los servicios de correos electrónicos. Pero, ¿te has parado a pensar que quizás algunos de esos servicios a los que recurrimos con asiduidad no sean gratuitos del todo?
¿Te has preguntado por ejemplo ‘’¿Cómo aseguran su rentabilidad las empresas que proveen servicios gratuitos de correos electrónicos?’’ Al final y al cabo, no te cobran nada cuando te das de alta e incluso cuando usas sus servicios.
Cuando Google actualizó sus términos de servicio en el abril de este año, la empresa informó a sus usuarios que todos sus correos entrantes y salientes eran analizados por el software de Google. En función de la imagen que el usuario proyectase de sí mismo en sus correos, se generaba un perfil del usuario con el fin de enviarle anuncios personalizados.
A día de hoy, nosotros ya debemos sabemos que los servicios gratuitos de correos electrónicos no son gratuitos en absoluto, a no ser que no valores tus datos personales. Las empresas como Google nos brindan sus servicios a cambio de tener acceso completo a toda la información que mandamos, recibimos y guardamos en sus servidores. A continuación, se vende esta información a terceros que quieren mandarnos publicidad. Dicho esto, aún existen muchas cuestiones sobre la forma exacta en que se produce el tráfico de nuestros datos.
Para arrojar más luz sobre este tema, se ha lanzado un proyecto de investigación liderado por el Investigador Mathias Lecuyer que se denomina “XRay Transparency for the Web”.
El prototipo del proyecto, que se encuentra en fase de desarrollo, es capaz de correlacionar los anuncios de Gmail con los correos analizados por Google y las recomendaciones de YouTube y Amazon con los videos y productos que se hayan visto anteriormente.